Aquel martes te conté que llovía en mí,
pero con el corazón empapado decidí volver a caminar.
Fuiste un arcoíris de color,
te esperaba para superar aquel temporal
imposible de esquivar.
Directa a ti,
fui sin miedos,
sin paraguas,
descalza,
con el corazón en un puño
y el alma abierta.

Foto y texto #MariposasNómadas.